Está en nuestro ADN. Hemos apostado desde el inicio por utilizar los mejores materiales y componentes profesionales en el diseño y fabricación de nuestros productos: desde el panel LCD hasta la calidad del aluminio que utilizamos para anodizar, pasando por la placas electrónicas diseñadas íntegramente por nuestro equipo de I+D. Creemos firmemente que los usuarios de nuestra marca merecen soluciones 100 % profesionales.

Tomemos a modo de ejemplo los paneles LCD; sin duda, los paneles de consumo han evolucionado hacia pantallas más estrechas y más ligeras, pero no deberíamos olvidar que están creadas para un uso doméstico. Existen numerosas diferencias entre los componentes de consumo y los componentes profesionales que vale la pena tener en cuenta.

Coste inicial versus a largo plazo

El precio juega un papel sumamente importante en la decisión de compra. Los paneles LCD de consumo son mucho más económicos que los profesionales, y también más estrechos. Sin embargo, en nuestro ámbito de aplicación, el coste debería considerar el factor tiempo. Si el objetivo que se persigue es fabricar un monitor que dure tanto como el mobiliario en el que se va a integrar, deberíamos considerar primordial utilizar paneles industriales y no de consumo.

Tiempo de vida

El tiempo de vida esperado de un panel industrial no baja de las 20.000 horas y a menudo alcanza las 40.000 o incluso 70.000 horas. Lo primero que deberíamos aclarar es qué se entiendo por “horas de vida”,  que no significa que el panel deje de funcionar transcurridas esas horas, sino que el factor que se considera es el brillo. El método generalmente aceptado para medir las horas de vida que indican los fabricantes de paneles es el número de horas de uso hasta que el brillo del monitor cae al 50 % de su valor original. Debemos considerar siempre la aplicación del monitor. Si los monitores están destinados a mostrar información crítica, a tomar decisiones estratégicas e incluso a analizar situaciones de crisis, es indispensable que reproduzcan la señal con la mejor calidad posible. Imaginemos una sala de crisis en la que los monitores estén operativos 24 horas al día, 7 días a la semana. Con un panel industrial, podríamos utilizar dichos monitores en su máximo nivel de brillo durante un período de 8 años, frente a 2 años si estos estuvieran fabricados con un panel de consumo.

 

Asimismo, es necesario tener en cuenta que existen diversos factores que ocurren en la vida real que son susceptibles de acortar esas horas. En condiciones perfectas, los monitores mantendrían el brillo durante las horas indicadas. Pero, existen factores ambientales que tienen una influencia directa sobre la vida del panel. Estos factores incluyen: corriente excesiva o picos de corriente, calor excesivo, movimientos y vibraciones. Recordemos que nuestros equipos se hallan en continuo movimiento y que están instalados en salas en las que se tomarán decisiones importantísimas: el uso de un panel industrial es decisivo.

Garantía, compatibilidad y disponibilidad de piezas de recambio:

Los monitores de consumo están diseñados justamente para aplicaciones domésticas. La garantía cubre el uso doméstico; en ningún caso el uso profesional e intensivo. Los componentes industriales ofrecen además la seguridad de estar disponibles durante varios años y, por lo tanto, los fabricantes podemos ofrecer una asistencia post venta de mayor alcance.

Funcionalidades y extras

Las placas electrónicas de los productos profesionales deberían estar específicamente diseñadas para su uso profesional. Si, por ejemplo, los monitores están instalados en una sala que se usa a lo largo del día y con condiciones de luminosidad variables, es interesante que a través de RS-422 o mediante control IP se pueda adaptar el brillo y el contraste para obtener siempre la mejor visibilidad. Otras funcionalidades tales como proporcionar diferentes entradas de video, la compatibilidad HDCP, incorporar una salida para la distribución de la señal en bucle y facilitar así el cableado, y facilitar la configuración y el diagnóstico remoto a través de una App que ayude a los integradores son otros aspectos fundamentales a considerar a la hora de elegir el producto que mejor se adapte a nuestras necesidades.